Me han llamado a las 9 de la mañana (se comprende que si te has recogido el día anterior a las 6 de la madrugá pues ya me dirás), en sábado, en domingo, a las 9 de la noche, a las 00.40 (sí si, a las una de la madrugá) dándole la papilla al niño, cambiándole los pañales al niño, intentando dormir al niño, en el wáter ( me venía mi marío con el móvil al cuarto de baño y tó)....vamo vamo un show....que si la familia me tenía que esperar pa comer, que si me tenían que esperar pa ir a la playa, en medio de la playa, tomándome un helado con los amigos, incluso mi amiga Anita me tuvo que rescatar de la mano en una tienda porque no me podía ni mover...Lo único bueno de todo es que no tengo depresión postvacacional, sólo un sabor amargo de todo lo que ha sucedido y sensación de tristeza pero bueno, otra cosa no se podía hacer, calculo yo que si no llego a estar así se hubieran perdido cerca de 30.000 Euros en ventas......
Ahora sí, por poco me cuesta el divorcio una vez, quedarme sin iphone porque podía salir volando por la ventana de la mano de mi marido unas cinco veces y los nervios desgastados (si es que ya no me quedan)
Lo peor ha sido compaginarlo con el peque, pues cada vez que lo estaba atendiendo sonaba el móvil y si no había nadie alrededor pues no veas. Hombre yo primero atiendo a mi nene y segundo el teléfono está claro vamos.
Bueno, ya una se va recuperando de todo lo ocurrido y poco a poco va recuperando la normalidad, aunque se avecinan grandes cambios pues al tener dos jefes y faltar uno de ellos, el otro es que ya modifica todo a su forma, con lo cual me tengo que preparar para un mes movidito, después de la semana que he pasado intentando actualizar la facturación y demás datos.
Ya empezaré a contar lo que he disfrutado del nene en las vacas que ahora que está más despierto pues lo pasa una mejor jejeje
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